Descripción
Lograr juntar una muy seria reflexión sobre la creación con las prácticas pedagógicas cotidianas y habituales abre un sendero renovador y, al mismo tiempo, fecundo para entender mejor lo que significa enseñar y aprender. El libro es un «convivio» para lograr que la enseñanza sea un «banquete creativo». Frente a una tendencia a poner el arte y la creación como algo fuera de la escuela o, en todo caso, reservado a mínimos espacios, la autora de este libro nos invita a comprender la fecundidad pedagógica del arte, poniendo el acento en el pensamiento creativo.En momentos en que pareciera que el desafío es someterse a un supuesto pensamiento único para entender la buena enseñanza, lo que este libro plantea es animarnos a resistir, evitando el rutinizar la enseñanza, abriendo alternativas fecundas para el trabajo.