Descripción
Hay quienes hacen de la creatividad su profesión, como sucede con los artistas en todas sus manifestaciones. Sin embargo, la mayoría de la gente tiende a dar por hecho que «está negada» para el oficio de la imaginación.
La realidad es que todos tenemos un potencial creativo y, sea cual sea la actividad a la que nos dediquemos, siempre necesitaremos de la creatividad propia, incluso para desempeñar mejor en la vida cotidiana. Lo que sucede es que, por lo general, nos falta un método para organizar la mente y dar salida a nuestra creatividad. No sabemos «como» y terminamos por perder la confianza en nuestra capacidad, con lo cual también la atrofiamos.